Su estructura recrea elementos esenciales y representativos de nuestras manifestaciones sociales y culturales. En ellos están embozados aspectos del paisaje y fundamentos económicos de los guadalupanos. Fluyen en el centro tres montañas circundantes emblemáticas, los morros de Mama Pacha, La Bola o Piedra de Cacao y la Manga del Cura; el maíz, la caña de azúcar, el café, la panela y el azadón entronizan históricamente el fundamento, la vocación y el celo de nuestros habitantes: el amor al trabajo y el apego por la tierra.
Diseñada horizontalmente con dos franjas de igual proporción en las que se yuxtaponen los colores amarillo y verde, de cuyo centro emerge el fulgor de una estrella blanca patentizando el lema que nos distingue en toda Antioquia " LUZ ENTRE MONTAÑAS ", están asentadas centrales de energía en nuestro territorio que son Guadalupe I, III, IV y Porce III.
La primera franja de color amarillo evoca el preciado metal- que refulgente extrajeron los mazamorreros y negros esclavos del capitán Pedro Martin de Mora en las orillas de los ríos Porce, Guadalupe o en las riveras de las quebradas Santa Petronila, Santa Gertrudis y su mina Nuestra Señora. Hecho sabiamente inmortalizado en las estrofas del himno. En la segunda franja, de color verde, confluyen la geografía particular de nuestros paisajes característicos con sus aves, sus flores y frutos de rica natura y variado tesoro, propios del valle de San Juan y El cañón del Porce o en las colinas prodigas de nuestras veredas.
La primera franja de color amarillo evoca el preciado metal- que refulgente extrajeron los mazamorreros y negros esclavos del capitán Pedro Martin de Mora en las orillas de los ríos Porce, Guadalupe o en las riveras de las quebradas Santa Petronila, Santa Gertrudis y su mina Nuestra Señora. Hecho sabiamente inmortalizado en las estrofas del himno. En la segunda franja, de color verde, confluyen la geografía particular de nuestros paisajes característicos con sus aves, sus flores y frutos de rica natura y variado tesoro, propios del valle de San Juan y El cañón del Porce o en las colinas prodigas de nuestras veredas.
